jueves, 29 de abril de 2010

Andrew Bird - Armchair Apocrypha


El día debería ser triste y trágico. No llega a serlo, es, más bien, tranquilo, sencillo, pero un poco confuso para él. En un momento siente que desencaja. Está en su cama y escucha algunos silbidos que, piensa, ningún ave podría imitar. También, un violín y una guitarra. Entonces, ansía tantas cosas, un beso, un cuerpo, unas manos, unas palabras quizá. No lo sabe. En realidad sí, pero no lo quiere admitir.

Se levanta y desayuna “heretics”. La timidez parece ir desapareciendo con cada sorbo de la canción. Se da cuenta que no pudo pensar ni estudiar lo suficiente a aquella persona. Quiere luchar. Quiere luchar, pero no por las plasticidades, sino por una canción, por ti.
link de descargar en los comentarios


2 comentarios:

Diego Ato Cadenas dijo...

http://www.mediafire.com/?tkjwugmeb2k

Unknown dijo...

Buen escrito. GRACIAS POR EL APORTE! :)